jueves, 9 de junio de 2011
abismos
Confrontado, hoy,
a la paradoja
esencial de tu decir,
percibo, no sin vértigo,
los abismos que confluyen
ya no tanto a las afueras
de mi cuerpo,
sino en lo profundo
e ignoto de mi ser.
Así, pues,
callados
-en ese silencio que más que
serenar me enerva-,
tales abismos
me subyugan
al punto de ansiar el abandono,
no tanto -insisto-
de mi castigado cuerpo
como de mi espiritual esencia.
Y esa tentación al
abandono
no es otra cosa
-y tú lo sabes-
que el eterno anhelo
no de fuga,
sino de absoluta integración
con todo y nada;
tentación cual
sed eterna,
nunca del todo satisfecha,
que justifica hacernos eco
del poeta
cuando pronuncia
la esencial y
suprema paradoja,
que es la de
"morir de sed junto a la fuente"
(Vayan estas sinceras y sencillas reflexiones para ti, Morfina, en reciprocidad a tu visita y vínculo con De Momentos y Palabras)
FLORESNIÑO
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario